Las recientes declaraciones del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, han vuelto a echar un cubo de agua fría sobre los mercados financieros. Reiteró que, en la actual situación económica, la tasa de desempleo es más crítica que la inflación. A pesar de que la tasa de inflación aún está algo lejos del objetivo del 2%, la tasa de desempleo se mantuvo en alrededor del 4.1% en junio, sin cambios significativos durante el último año.
En este caso, la Reserva Federal parece no estar apurada por ajustar la política de tasas de interés, prefiriendo mantener el statu quo. El mercado originalmente esperaba que Powell diera alguna pista sobre si habría un recorte de tasas en septiembre, pero su discurso resultó ser ambiguo y no proporcionó ninguna información sustancial. Peor aún, los datos de inflación publicados el jueves superaron las expectativas, lo que disminuyó aún más la probabilidad de un recorte de tasas.
La Reserva Federal parece estar esperando una señal clara: un aumento significativo en la tasa de desempleo. Mientras el mercado laboral se mantenga estable y la inflación sea difícil de controlar, no tienen razones para reducir las tasas de interés. La insinuación de Powell parece ser que la Reserva Federal no tomará medidas de flexibilización anticipadas antes de que surjan problemas en el mercado laboral.
Por lo tanto, los datos de la tasa de desempleo de julio que se anunciarán pronto son especialmente importantes. Solo cuando la tasa de desempleo comience a aumentar, la Reserva Federal podría considerar cambiar de postura. Sin embargo, esto también plantea una pregunta: ¿será demasiado tarde si se espera a actuar realmente? El riesgo en el mercado podría haberse acumulado silenciosamente.
La situación económica actual es bastante compleja: la inflación es difícil de reducir y el mercado laboral es demasiado fuerte, lo que dificulta a la Reserva Federal actuar en ambas direcciones. Sin embargo, a partir de las recientes declaraciones de Powell, parece que esta vez la Reserva Federal realmente no tiene intención de cambiar de rumbo anticipadamente, mostrando una firme determinación de combatir la inflación. Esta actitud podría tener un impacto profundo en los mercados financieros, y los inversores deben estar atentos a los desarrollos posteriores.
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TokenomicsTinfoilHat
· hace7h
Sigue jugando con datos, ya duerme, Bao.
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FloorPriceNightmare
· hace21h
Cortado de un solo golpe, ya sea horizontal o vertical.
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MidnightSeller
· 08-01 07:52
Esta ola de La Reserva Federal (FED) parece poco confiable.
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airdrop_whisperer
· 08-01 07:42
O se baja la tasa de interés, o se espera que la inflación explote.
Las recientes declaraciones del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, han vuelto a echar un cubo de agua fría sobre los mercados financieros. Reiteró que, en la actual situación económica, la tasa de desempleo es más crítica que la inflación. A pesar de que la tasa de inflación aún está algo lejos del objetivo del 2%, la tasa de desempleo se mantuvo en alrededor del 4.1% en junio, sin cambios significativos durante el último año.
En este caso, la Reserva Federal parece no estar apurada por ajustar la política de tasas de interés, prefiriendo mantener el statu quo. El mercado originalmente esperaba que Powell diera alguna pista sobre si habría un recorte de tasas en septiembre, pero su discurso resultó ser ambiguo y no proporcionó ninguna información sustancial. Peor aún, los datos de inflación publicados el jueves superaron las expectativas, lo que disminuyó aún más la probabilidad de un recorte de tasas.
La Reserva Federal parece estar esperando una señal clara: un aumento significativo en la tasa de desempleo. Mientras el mercado laboral se mantenga estable y la inflación sea difícil de controlar, no tienen razones para reducir las tasas de interés. La insinuación de Powell parece ser que la Reserva Federal no tomará medidas de flexibilización anticipadas antes de que surjan problemas en el mercado laboral.
Por lo tanto, los datos de la tasa de desempleo de julio que se anunciarán pronto son especialmente importantes. Solo cuando la tasa de desempleo comience a aumentar, la Reserva Federal podría considerar cambiar de postura. Sin embargo, esto también plantea una pregunta: ¿será demasiado tarde si se espera a actuar realmente? El riesgo en el mercado podría haberse acumulado silenciosamente.
La situación económica actual es bastante compleja: la inflación es difícil de reducir y el mercado laboral es demasiado fuerte, lo que dificulta a la Reserva Federal actuar en ambas direcciones. Sin embargo, a partir de las recientes declaraciones de Powell, parece que esta vez la Reserva Federal realmente no tiene intención de cambiar de rumbo anticipadamente, mostrando una firme determinación de combatir la inflación. Esta actitud podría tener un impacto profundo en los mercados financieros, y los inversores deben estar atentos a los desarrollos posteriores.